Cuando una arteria se estrecha debido a un depósito excesivo de materia grasa sobre su pared interna (la placa de ateroma), el flujo sanguíneo reduce su velocidad o se bloquea.
Consecuencias: los órganos que se encuentran corriente abajo (por ejemplo, el corazón y el cerebro) no reciben suficiente oxigeno e irrigación. Se requiere entonces una intervención de urgencia.(…)
La angioplastia permite reestablecer el flujo sanguíneo sin tener que operar al paciente. Tomemos el caso de una arteria coronaria: el cirujano introduce en la arteria femoral un catéter de 2 mm de diámetro cuya extremidad está provista de un pequeño globo.(…)
Con ayuda visual radiológica, guía el catéter hasta la zona donde la arteria se ha estrechado.(…)
¿Y luego? Infla y desinfla el globo múltiples veces para aplastar la placa de ateroma y dilatar la pared arterial.(…)
Pero muchas veces existe el peligro de un bloqueo ulterior.(…)
Se coloca entonces una prótesis de metal inerte llamada stent.
El stent se encuentra usualmente empapado de un producto que, al difundir lentamente, disminuye el riesgo de recurrencia.
Nos referimos entonces a un stent activo.